**Capítulo 17: La Unión con la Naturaleza**

La mañana siguiente, Maddie se despertó con una sensación extraña en su cuerpo, como si algo hubiera cambiado dentro de ella. Se levantó de la cama y se dirigió hacia el baño, sin saber qué estaba pasando. Al mirarse al espejo, notó que su rostro parecía diferente, sus ojos tenían un brillo extraño. Mientras se preparaba para el día, no podía dejar de pensar en la experiencia que había tenido la noche anterior con el árbol. Se sentía cambiada, como si algo dentro de ella hubiera sido despertado. De repente, recordó la sensación de haberse unido al árbol y se sintió avergonzada. Sin embargo, mientras se cambiaba de ropa, notó que su cuerpo parecía más sensible de lo normal. Se acercó a la ventana y miró hacia afuera, recordando el árbol del jardín. De repente, sintió un impulso extraño. Se dirigió hacia el jardín, sin saber qué la estaba llevando allí. Al llegar, se detuvo en frente del árbol con el que se había unido la noche anterior. Sin pensar, se acercó al tronco y lo abrazó de nuevo. Esta vez, algo dentro de ella se movió de manera diferente. Comenzó a sentir una sensación extraña en su vulva, como si estuviera buscando algo. De repente, se deslizó hacia abajo y se sentó a la base del tronco, rodeándolo con sus brazos. Sin pensar, comenzó a frotar su vulva por las ramas del árbol, sintiendo una sensación extraña y placentera. La conexión con el árbol parecía estar creciendo, como si estuviera volviendo a unirse a algo que siempre había estado allí. La sensación fue intensa y extraña, pero de alguna manera, se sentía completa. Maddie se entregó a la sensación, permitiendo que su cuerpo se uniera al árbol de una manera que nunca había experimentado antes. Mientras se movía contra el árbol, sintió que su cuerpo estaba cambiando, como si estuviera volviendo a ser parte de algo más grande. La unión con el árbol parecía estar despertando algo dentro de ella, algo que había estado dormido durante mucho tiempo. La experiencia fue intensa y extraña, pero de alguna manera, se sentía liberada. Cuando finalmente se separó del árbol, se sintió cambiada, como si algo dentro de ella hubiera sido despertado de nuevo.