**La Oscuridad se Cierra**

La voz de la criatura se desvaneció lentamente, dejando a Maddie sumida en un silencio aterrador. La oscuridad parecía haberse vuelto más densa, más pesada, y Maddie podía sentir su peso sobre ella. Se derrumbó en el suelo, rodeada de una negrura que parecía tener vida propia. De repente, una luz débil se encendió en la distancia. Maddie se levantó con dificultad, sus ojos fijos en la luz que crecía en intensidad. Era una antorcha, sostenida por una figura que se acercaba lentamente. La figura se detuvo frente a Maddie, y ella pudo ver que era una mujer. Su rostro estaba pálido y demacrado, y sus ojos parecían haber visto cosas que Maddie no podía imaginar. La mujer llevaba un vestido largo y desgarrado, y su cabello estaba despeinado y sucio. "¿Quién eres?" preguntó Maddie, su voz temblorosa. La mujer no respondió. En su lugar, se acercó a Maddie y le tendió la antorcha. Maddie la tomó, y la luz de la antorcha iluminó la habitación. Pudo ver que estaban en una especie de celda, con paredes de piedra y un techo abovedado. La puerta de hierro estaba cerrada con llave, y no había ventanas. La mujer se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la puerta. Maddie la siguió, la antorcha en la mano. "¿Adónde vamos?" preguntó Maddie. La mujer no respondió. Se detuvo frente a la puerta y comenzó a forcejear con la cerradura. Maddie se acercó y vio que la mujer estaba tratando de abrir la puerta. De repente, la cerradura se abrió con un clic. La puerta se abrió con un crujido, y Maddie pudo ver un pasillo largo y oscuro. La mujer se dio la vuelta y miró a Maddie. Por un momento, Maddie pensó que vio algo en sus ojos, algo que parecía ser esperanza. "Vamos", dijo la mujer, su voz baja y ronca. Maddie la siguió por el pasillo, la antorcha en la mano. No sabía adónde iban, pero sabía que tenía que escapar de la criatura. La oscuridad parecía estar cerrándose sobre ella, y no tenía mucho tiempo. Mientras caminaban, Maddie notó que la mujer parecía estar mirando hacia atrás, como si temiera que algo las estuviera siguiendo. Maddie se dio la vuelta, pero no vio nada. "¿Qué pasa?" preguntó Maddie. La mujer se detuvo y se dio la vuelta. Por un momento, Maddie pensó que vio algo en sus ojos, algo que parecía ser miedo. "Estamos cerca", dijo la mujer, su voz apenas audible. Maddie no sabía qué significaba eso, pero sabía que tenía que seguir adelante. La oscuridad parecía estar cerrándose sobre ella, y no tenía mucho tiempo.