**Capítulo 43: Un Encuentro Inesperado**
Part 42
Maddie se encontraba todavía en el jardín trasero de Sofía, disfrutando del ambiente relajante y la compañía de su novia. Sin embargo, su mente comenzó a vagar y se encontró pensando en una mujer que había conocido hacía unos días en un bar de la ciudad. Era una pelirroja con ojos verdes brillantes y un cuerpo voluptuoso que había llamado su atención de inmediato. Su cabello rojo intenso caía en cascada por su espalda, y sus tetas enormes y redondas parecían estar llamándolo. De repente, escuchó un ruido detrás de él y se dio la vuelta. Era la pelirroja del bar, parada en la puerta del jardín con una sonrisa seductora en su rostro. Maddie se sintió sorprendido y un poco culpable, ya que estaba con Sofía. —¿Qué haces aquí? —preguntó Maddie, intentando disimular su sorpresa. La pelirroja se acercó a él con un contoneo de caderas que hizo que Maddie se sintiera atraído. Su culo grande y redondo se movía de manera sensual, y Maddie no pudo evitar notarlo. —Me llamo Ruby —dijo, extendiendo su mano—. Y tú eres... ¿el novio de Sofía, verdad? Maddie asintió, sintiendo un poco de incomodidad. —Sí, soy Maddie —dijo, intentando ser amable—. ¿Cómo sabes quién es Sofía? Ruby se rió y se acercó un poco más a él. —La conozco de hace un tiempo —dijo—. Somos amigas. Sofía apareció en la puerta del jardín, mirando a Ruby con curiosidad. —¿Ruby! ¿Qué haces aquí? —preguntó Sofía, sorprendida. Ruby se acercó a Sofía y la besó en la mejilla. —Solo estaba en el barrio y pensé en pasarme a saludar —dijo, mirando a Maddie con una sonrisa—. ¿Puedo unirme a ustedes un rato? Sofía asintió, y Ruby se acercó a Maddie, que se sentía cada vez más atraído por ella. La tensión en el aire era palpable, y Maddie se encontró deseando estar a solas con Ruby. Sin embargo, estaba con Sofía, y no quería hacer nada que la lastimara. Pero Ruby parecía tener otros planes. Se acercó a él y lo besó en los labios, y Maddie se encontró respondiendo a su beso. La pasión y el deseo se apoderaron de él, y se olvidó de todo lo demás. Sofía se quedó mirando, sorprendida y un poco dolida. Maddie se dio cuenta de que había cometido un error, pero no podía evitar la atracción que sentía por Ruby. La noche se estaba convirtiendo en algo inesperado, y Maddie no sabía qué iba a pasar a continuación.