**La Noche de la Transformación**

La oscuridad de la noche parecía tener un efecto extraño en Maddie, como si la luna llena la hubiera transformado en algo más que humano. Mientras caminaba por la calle, su mirada se posó en una pareja que se encontraba en un portal cercano. La chica rubia voluptuosa y el chico moreno estaban completamente absortos en su actividad, sin darse cuenta de la presencia de Maddie. La pareja parecía estar en un mundo propio, ajena a la transformación que había ocurrido en Maddie. La chica rubia se movía con sensualidad, mientras que el chico moreno la besaba con pasión. Maddie se detuvo a observarlos, su mirada fija en la pareja. No había emoción alguna en su rostro, solo una curiosidad morbosa. De repente, la chica rubia levantó la vista y vio a Maddie. Su mirada se encontró con la de Maddie, y por un momento, ambas mujeres se miraron fijamente. La chica rubia pareció sorprendida, pero no asustada. En su lugar, una sonrisa sensual se extendió por su rostro. El chico moreno, sin embargo, se dio cuenta de la presencia de Maddie y se detuvo en seco. Su mirada se posó en Maddie, y luego en la chica rubia, como si no entendiera qué estaba sucediendo. La chica rubia lo tomó de la mano y lo acercó más a ella. "No te preocupes, cariño", le susurró la chica rubia al oído. "Creo que ella quiere unirse a nosotros". Maddie se rió, una risa baja y gutural que hizo que la pareja se mirara entre sí. La chica rubia se levantó y se acercó a Maddie, su mirada fija en la de ella. "¿Quieres unirte a nosotros?", le preguntó la chica rubia, su voz sensual y provocativa. Maddie se detuvo a pensar por un momento. La noche había cambiado, y ella había cambiado con ella. No era la misma mujer que había sido horas antes. "¿Por qué no?", se rió Maddie, su voz ahora más gutural y menos humana.