**Capítulo 19: La Conexión Física**

La conexión con el árbol había sido intensa y liberadora, pero Maddie sabía que todavía había mucho que explorar en su nuevo estado de conciencia. Se levantó de rodillas y se detuvo frente al tronco, sintiendo cómo su cuerpo seguía vibrando con la energía del árbol. Sin pensarlo, comenzó a frotar su vulva de atrás a adelante contra el tronco, buscando una sensación de alivio y placer. El látex del disfraz de coneja crujía suavemente mientras se movía, y Maddie se sintió transportada a un estado de excitación creciente. El árbol parecía estar respondiendo a su movimiento, ya que Maddie sentía cómo su energía se intensificaba y se volvía más palpable. Comenzó a jadear suavemente, sintiendo cómo su cuerpo se acercaba a un clímax. La cola de coneja se movía detrás de ella, como si estuviera bailando al ritmo de su cuerpo. Maddie se sintió cada vez más abandonada, permitiendo que su instinto la guiara en este proceso de conexión con la naturaleza. Mientras se frotaba contra el tronco, Maddie comenzó a sentir una serie de sensaciones intensas y desconocidas. Su cuerpo parecía estar respondiendo de manera autónoma, como si hubiera encontrado un ritmo primitivo y natural. El árbol seguía allí, imponente y silencioso, pero Maddie sabía que estaba participando en este proceso de conexión. La energía entre ellos era palpable, y Maddie se sintió cada vez más unida al árbol y a la naturaleza. De repente, Maddie alcanzó un clímax intenso y liberador. Se detuvo, jadeando suavemente, y se sintió renovada y transformada. El árbol seguía allí, pero ahora Maddie se sentía conectada a él de una manera física y emocional. Se alejó del tronco, sintiendo cómo su cuerpo seguía vibrando con la energía del árbol. Se detuvo a mirar el árbol, y se sintió agradecida por la conexión que había experimentado. Sabía que su vida había cambiado para siempre, y que su relación con la naturaleza sería diferente a partir de ahora.