**La Luz en la Oscuridad**
Part 21
Maddie corrió durante lo que pareció una eternidad, sin saber hacia dónde iba ni qué iba a encontrar. La oscuridad del parque se cernía sobre ella, y su corazón latía con fuerza en su pecho. Finalmente, se detuvo en seco, jadeando y mirando a su alrededor. Se encontraba en un claro rodeado de árboles altos y frondosos, y en el centro del claro había una figura que la hizo detenerse en seco. Era una chica rubia de ojos verdes, con el cabello largo y suelto que caía sobre sus hombros como una cascada de oro. Maddie se quedó boquiabierta al ver que la chica estaba... abrazando un árbol. No solo eso, sino que parecía estar besándolo apasionadamente. Maddie se sintió como si hubiera visto algo que no debería haber visto, y se dio la vuelta para marcharse, pero la chica la detuvo. "Espera", dijo la chica, sin dejar de besar el árbol. Maddie se detuvo, intrigada a pesar de sí misma. La chica se apartó del árbol y se volvió hacia ella, sonriendo. "Mi nombre es Eira", dijo, extendiendo la mano. Maddie la estrechó, sintiendo una sensación extraña al tocar su palma. "Yo soy Maddie", respondió, intentando parecer normal a pesar de la situación surrealista. Eira asintió, y su mirada se posó en el árbol que había estado besando. "Este es Oakley", dijo, acariciando la corteza del tronco. "Es un árbol muy especial". Maddie se sintió confundida, pero Eira parecía tan seria que decidió seguirle el juego. "¿Qué es lo que lo hace tan especial?", preguntó. Eira sonrió, y sus ojos verdes brillaron con una luz interior. "Oakley tiene el poder de curar", dijo. "Y también tiene el poder de revelar secretos". Maddie se sintió un escalofrío recorrer su espalda al escuchar las palabras de Eira. ¿Podría ser que esta chica rubia y su árbol mágico fueran la clave para descubrir la verdad sobre su pasado? Se sentó en el suelo, junto a Eira y Oakley, y se dispuso a escuchar lo que la chica tenía que decir.